viernes, 16 de mayo de 2008

Vigorexia

Testimonio:

Rodrigo elige un nombre ficticio para dar su testimonio. Aunque sus razones para justificar su adicción al músculo son muy reales: “Hacer ejercicio es sano, sólo busco tener un cuerpo de diez, ser fuerte. No veo que eso tenga nada de malo, aunque a veces haga hasta seis horas de pesas y máquinas”. Trabaja justo encima de un gimnasio, lo que le permite aprovechar sus horas de comida y la cercanía para hacer más y más ejercicio. Además del esfuerzo físico, Rodrigo, de 28 años e informático de profesión, vigila con lupa su dieta, a base de proteínas, suplementos y complementos alimenticios. Reconoce que a veces abandona responsabilidades para satisfacer su obsesión por las pesas.
Todavía no ve en peligro su puesto de trabajo, pero sí su círculo social. Admite que ha dejado de ver a sus amistades, que discute con la familia porque le cuestionan su abuso del gimnasio y que muchas veces se enoja de forma descontrolada cuando su aparato favorito está en reparación.

viernes, 9 de mayo de 2008

Otros trastornos: "La Vigorexia".

VIGOREXIA:

Es un trastorno alimenticio caracterizado por la presencia de una preocupación obsesiva por el físico y una distorsión del esquema corporal (dismorfofobia).
Existen 2 manifestaciones: la extrema actividad del deporte o, la ingesta o comedor compulsivo para subir de peso pero en el espejo verse esqueléticos y seguir comiendo más. Aunque los hombres son los principales afectados por la vigorexia, estos oscilan entre los 17 y los 36 años de edad, que poco a poco van dedicando más tiempo a la actividad física. Por ejemplo el caso de una persona que con 27 años viene realizando ejercicio desde los 18, pesándose después de todas las comidas que realiza a lo largo del día, su obsesión es la de verse reflejado en cualquier espejo. Es una enfermedad que también afecta a las mujeres. La vigorexia lamentablemente ha aumentado de cifras pues antes solo 2 de cada 10 la sufrían ahora es 4 de cada 10, pues lo que empieza con una simple idea de subir de peso puede ser una idea mortal .La baja autoestima, convulsiones, mareos, dolores de cabeza y taquicardias son síntomas de este desorden. Es más mortal que la anorexia y bulimia, ya que sólo puede estar en el cuerpo o el enfermo puede durar con este trastorno máximo 6 meses.

Su historia:
Esta patología aún no ha sido descripta como una enfermedad por el grupo médico internacional, pero el estudio por el grupo del psiquiatra Harrison G Pope del Hospital McLean de Estados Unidos acuñó este término tras evaluar a nueve millones de americanos que frecuentaban los gimnasios. Un millón de hombres podrían estar afectados por un desorden emocional que les impide verse como en realidad son. La vigorexia puede evolucionar a un cuadro obsesivo-convulsivo que hace que los afectados se sientan fracasados, abandonen todas sus actividades sociales e incluso laborales para entrenar sin descanso; buscando la ayuda de productos dietarios y planes alimenticios ricos en proteínas.

Causas:
Implica una adicción a la actividad física (especialmente a la musculación): los vigoréxicos suelen realizar ejercicio físico excesivo, a fin de lograr un desarrollo muscular mayor de lo normal, pues de lo contrario se sienten débiles o enclenques. A esta exigencia se suma un trastorno en la alimentación que se hace patente en una dieta poco equilibrada en donde la cantidad de proteínas y carbohidratos consumidos es excesiva, mientras que la cantidad de lípidos se reduce. Esto puede ocasionar alteraciones metabólicas importantes, sobre todo cuando el vigoréxico consume esteroides que ocasionan cambios de humor repentinos.

Síntomas:
Obsesión por un cuerpo musculoso, pero al extremo, ya que aunque ya lo haya conseguido, su visión esta tan distorsionada, que frente al espejo sigue viéndose débil. Distorsión de la imagen corporal Baja auto estima, y por tanto, darle más valor a la apariencia física. Entrenamiento con dedicación compulsiva y casi exclusiva, dejando de lado otros asuntos y eventos de orden social, laboral y cultural. Adicción a la báscula Tendencia a la auto medicación Dieta muy alta en proteínas, la mayoría de los casos la dieta va complementada con productos anabólicos y esteroides. Obsesión con el cuerpo comparte muchos rasgos con la anorexia. Edad de aparición entre los 18 y 25 años Sentimiento de culpabilidad cuando no se entrena.

Cómo prevenirla:
  • Ejercitarse siempre bajo la supervisión de un entrenador· profesional.
  • Practicarse un examen general físico que determine el estado· de salud, así como las necesidades y capacidades del individuo.
  • Llevar un entrenamiento adecuado a tu deporte y nivel físico.
  • Detenerse en cuanto exista un síntoma de fatiga, cansancio o dolor muscular.

Si bien es cierto que la vigorexia es un problema serio, también es cierto que tiene remedio. Para recuperarse de este desorden es necesario, que el afectado tome conciencia y acepte el trastorno. Es importante que se tome terapia psicológica individual y con técnicas de autoestima que le ayuden a darse cuenta que la imagen reflejada en el espejo no es como la percibe y que tiene que modificar su conducta con respecto a su cuerpo. También resulta esencial el apoyo de la familia y amigos. La ayuda de familiares y/o amigos es primordial pues debido a la pena de su enfermedad evitan ir con nutricionistas o especialistas.

Consecuencias:
La enfermedad puede ser mortal y es peligrosa si es severa pues el corazón se hace más pequeño debido a la falta de sangre. Entonces, aumenta el riesgo de padecer enfermedades, lesiones hepáticas, cardiacas, disfunción eréctil, problemas de fertilidad y cáncer de próstata, entre otras. Deformaciones óseas y problemas articulares por la hipertrofia y el sobreesfuerzo muscular.